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Rebeldía o indisciplina



Siempre es desconcertante ver los cambios que ocurren en la vida de nuestros hijos(as) en el paso del tiempo.  Escucha música que no es la nuestra, quiere usar ropa que no es de nuestro agrado, tiene amigos que nos preocupan.  Sus notas en el colegio están cambiando y sobre todo, su rebeldía e indisciplina es muy alta.  ¿Cómo lo guió en esta etapa?.  ¿Hay un camino que podamos seguir?.   Veamos algunas opciones.

Cuando su hijo sea rebelde o indisciplinado:

1. Evite el impulso de ir al rescate. Permita que su adolescente asuma la responsabilidad y que usted no sienta la culpa por las acciones de sus hijos.

2. No se convierta en un cómplice. No complique los problemas de sus hijos dándoles la impresión que todo está bien y que las cosas no están tan mal. No permita que sus hijos piensen que papá y mamá siempre "me sacarán de apuros".

3. Discipline con amor. Manténgase firme y no permita que el tiempo venga a hacerle perder su firmeza.

4. Demuestre el amor incondicional. Siempre dígales y demuéstreles a sus hijos que usted los ama de la misma manera que Cristo nos ama - incondicionalmente. Aprenda a separar el amor que tiene hacia sus hijos de las malas acciones que ellos comenten. Jesús siempre ama a las personas pero en algunos casos lo hace sin aprobar el comportamiento que ellos tienen (Juan capítulo 4).

5. Use los errores de sus hijos como una oportunidad para ser transparente con ellos. No tenga temor de expresarles sus sentimientos hacia ellos. Escuche a sus hijos cuando ellos quieran compartir con usted lo que realmente están sintiendo. Cuando sea el tiempo apropiado, déjeles saber a sus hijos que usted es imperfecto y que también cometió errores en su juventud. 

6. ¡Vaya al corazón! Hable sobre la importancia del saber lo que está en el corazón. Lo que sale de la boca y las cosas que hacemos, primero comienzan en el corazón (lea Mateo 15:18-20)

7. Sea honesto sobre su responsabilidad en el comportamiento de su hijo adolescente. Si usted está provocando o irritando a sus hijos, admítalo. Si está reaccionando más de lo debido a ciertas actitudes o acciones de su adolescente, admítalo. Déjeles saber que como adolescentes ellos comenten errores y que usted como padre también se equivoca a veces. Aprenda y luego dé un ejemplo a sus hijos al decir: "me equivoqué, cometí un error, perdón".

8. No forme una alianza con su adolescente para "unirse" contra su cónyuge. Los niños y adolescentes nunca fueron creados con la intención de ser usados como "armas de manipulación" en el matrimonio. Los jóvenes que sienten que están en el centro de los pleitos matrimoniales desarrollan actitudes y comportamientos enfermizos como reacción al hecho de que fueron usados como peones en los problemas de sus padres. 

9. Actúen como un "equipo" y no sólo como un lugar donde la gente vive bajo el mismo techo. Usted y sus hijos son un "equipo", "un solo cuerpo", donde los miembros del hogar están conectados el uno al otro. Cada actitud, acción y comportamiento negativo afecta a toda la familia. Cada miembro de la familia es importante y necesario para que el equipo funcione. Explíqueles este concepto a sus hijos. Viva en un sistema de equipo y no simplemente como personas que viven juntos (lea 1 Corintios capítulo 12).

10. Como padres, francamente pregúntese: ¿qué esta pasando en nuestro matrimonio o en nuestro hogar para que mi hijo o hija esté actuando con rebeldía? Las actitudes y los comportamientos de los adolescentes son un buen barómetro para medir lo que está pasando en el hogar y el matrimonio. Busque ayuda de un consejero cristiano si es posible. Sobre todo, ore por su adolescente. Incluso hágalo en la presencia de sus hijos y no tenga temor de abrir su corazón a Dios. Invite a Dios para que le ayude con los problemas de la adolescencia y sea específico en sus oraciones. Dios puede hacer los cambios en su adolescente que a veces usted no puede hacer. Pídale a Dios con fe que intervenga a solucionar los problemas de sus hijos y del hogar. Sea transparente con Dios y la familia, y Él le podrá dirigir por el buen camino que permitir á la sanidad de la relación entre el adolescente rebelde y sus padres.

 

Textos para meditación: Ustedes y sus hijos son un solo cuerpo, una unidad

•   1 Corintios 12:12 - De hecho, aunque el cuerpo es uno solo, tiene muchos miembros, y todos los miembros, no obstante ser muchos, forman un solo cuerpo. Así sucede con Cristo.

•        1 Corintios 12:25-26 - A fin de que no haya división en el cuerpo, sino que sus miembros se preocupen por igual unos por otros. Si uno de los miembros sufre, los demás comparten su sufrimiento; y si uno de ellos recibe honor, los demás se alegran con él. 

•        Santiago 1:2-5 - Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas, pues ya saben que la prueba de su fe produce constancia. Y la constancia debe llevar a feliz término la obra, para que sean perfectos e íntegros, sin que les falte nada. Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.

Esperamos que estos consejos sean de ayuda para usted y su familia.


Lic. Maynor Salguero

Ministerio Llamados a Servir
Unidad Formativa para Padres IEAL

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