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Serie: Prohibido Rendirse - La Oportunidad



Introducción 


A través de los años se cuentan las historias de épicas batallas que permanecen aún con el paso del tiempo.  Una de esas míticas batallas, incluso producida en libros y películas es la del gran rey Leonidas y sus 300 valientes en el año 480 A. C. El lugar: el paso de las Termópilas, el único punto por el cual las huestes enemigas podían pasar.  El enemigo: el poderoso rey Persa Jerjes I.  Frente a los emisarios persas, aquel valiente rey espartano se plantó.  Su misión era una lucha suicida.  No tenían ninguna posibilidad de victoria.  300 espartanos frente a un interminable ejército de más de 275,000 persas.  El significado del nombre  Leonidas es muy bonito: hijo de león.  Sus palabras siguen siendo inspiración para todos los que tienen luchas hoy día. Frente aquel gran reto Leonidas sube a la cumbre del risco y grita a su ejército: “Agrúpense, hoy está prohibido rendirse, esa es la ley de Esparta; nos quedaremos, pelearemos y moriremos, pero jamás retrocederemos”. 

Como me gustaría que esas palabras fueran inspiración para tantos padres de familia hoy en día que estamos en una guerra, no contra soldados, no contra flechas o lanzas,  sino contra la maldad y el fiero dominio del mal contra nuestros hijos.  Estamos en una guerra en la cual nuestros hijos nos necesitan.  Por eso es prohibido rendirse. 

La oporturnidad


Una buena pregunta que me han hecho muchos padres es: ¿Cómo puedo tener hijos que honren a Dios?  Nosotros, los que estamos en esta lucha, debemos aprender una lección que será de vida o muerte para el futuro.  Antes que nuestros pequeños lleguen a la edad en la que ya no podamos influir en ellos se hace necesario aprovechar la oportunidad para formales.

¡Formar a nuestros hijos es trascendental para el futuro!

Lamentablemente muchos padres han cedido esa tarea tan importante a otros; la iglesia, el colegio, y temo, que, de forma muy equivocada a la televisión, los videojuegos, la persona que trabaja en la casa; o en el peor de los casos a nadie.  Con toda autoridad debo decirles que este desinterés de muchos padres en la formación de los hijos trae dolor y consecuencia que sin duda lamentarán. Debo con mucha pena decir que lo más  seguro es que veamos hogares con muchos problemas.  No podemos cerrar los ojos a nuestra responsabilidad.  Yo debo interesarme.  Si muestro desinterés, habrá un resultado. 

Veamos por lo menos 4 resultados que muestran un evidente  desinterés de los padres en la formación de su hijos:

Impacto en la formación académica. (estudiantes mediocres)
Formación moral debilitada (hijos perversos)
Relaciones extrañas (hijos egoístas, padres permisivos)
Debilidad espiritual (Hijos amantes del mal = brujas, encantos, demonios, atracción hacia lo oculto o lo pseudo espiritual)

Para Leonidas y su esfuerzo por defender el paso de las Termópilas,  la estrategia de batalla era tan importante.  Para notros como padres la oportunidad en esta batalla esta a nuestro alcance.  Lo que sí es claro es que tenemos prohibido rendirnos en la búsqueda del bien de nuestros hijos y en su formación.  La oportunidad es temporal, ya que los años pasan muy rápido.  La ventana del tiempo en su formación es apenas de 7 a 8 años, antes que entren en la etapa pre-juvenil en la que ya será más difícil el impacto.  ¡No dejes ir tu oportunidad, aprovéchala! 

De inmediato surge una pregunta:  ¿Qué podemos hacer para aprovechar nuestra oportunidad?  Les comparto algunas ideas que a muchos de nosotros nos han sido útiles.

1-    Para dar formación: A T E la vida de su hijos a la suya.


Voy a usar un acróstico para que me ayude a recordar la forma más sencilla de aprovechar esta oportunidad.

A-   Amor Incondicional:  
 
La raíz profunda en la vida de nuestros hijos es desde la cuna, incluso antes.  Nuestros hijos necesitan muestras de amor desde la cuna y en grandes cantidades, en especial en esta época trascendental de la vida.  Este amor no esta condicionado a sus actos, comportamiento, resultados de estudio o cualquier otra razón.  Los amamos sin condición.

T – Tiempo Intencional: 

El reto más grande para todo padre de familia es precisamente la forma de usar el tiempo. Decimos intencional ya que debe ser desde mi voluntad, nunca por obligación y menos por presión. Yo como padre decido cuanto tiempo quiero estar con mis hijos. La decisión final es mía. 
E – Ejemplo Trascendental: 
Nuestra manera de vivir es tan importante y lo que nuestros hijos ven les afectará para la                            vida.  Decimos trascendental porque lo que ellos lleven de recuerdo en su mente y corazón                        afectará  sus vidas en el futuro.

2-    Consejos para aprovechar nuestra oportunidad:

Para llevar a casa quiero retarles con estos consejos prácticos, cada uno de ellos puede hacer la diferencia.

a)     Para el Amor:
Exprese físicamente el amor.
Exprese audiblemente el amor.
b)    Para el tiempo:
Defina con claridad las prioridades en su agenda.
Planifique el tiempo que quiere tener con sus hijos.
c)     Para el ejemplo:
El ejemplo no se enseña, el ejemplo se vive.
El ejemplo es un poderoso maestro y se repite.

 


Conclusión


En esta guerra sin cuartel a favor de nuestros hijos, está prohibido rendirse.  Que Dios nos ayude y que podamos aprovechar nuestra oportunidad.  

Lic. Maynor Salguero
Llamados a Servir
Parent Training América Latina




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